Resumen:
Las conductas desafiantes se definen como el comportamiento desobediente, hostil y desafiante dirigido hacia las personas que representan la autoridad. Constituyen un desafío para maestros, padres de familia y demás actores involucrados e interesados en el desarrollo psicológico y social del niño, dado que la no intervención temprana podría traer consigo problemas conductuales de mayor envergadura en los años posteriores de los implicados. Se asocia el comportamiento desafiante a la necesidad del niño de comunicar alguna situación de la cual desconoce en sí mismo como abordar, o en su defecto las prácticas pobres de crianza que conllevan al menor a intentar trasmitir un mensaje con las herramientas que tiene a su alcance.